La actual sociedad de la información, caracterizado por el uso generalizado de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) en todas las actividades humanas y por una fuerte tendencia a la mundialización económica y cultural, exige en todo ciudadano competencias personales, sociales y profesionales para poder afrontar los continuos cambios que imponen en todos los ámbitos los rápidos avances de la ciencia y la tecnología; por lo tanto la educación debe mantenerse al día y darle sentido al estudio continuo y autodidacta. Este debe ser la característica básica de la autoformación universitaria.
La mescla sabia de ciencia, tecnología, saberes, tradiciones, investigación, filosofía, religiones, culturas, artes, deporte y habilidades diversas para desarrollar una adecuada sensibilidad humana con conciencia del trinomio individuo-sociedad-especie es científicamente más importante que la sola obtención de un título profesional. Lo que importa es convertir al estudiante en una persona de pensamiento relacionador, mente crítica, con una gran autoconfianza y sentido de emprendimiento para abordar todo tipo de problema inesperado. Este tipo de educación no depende del tipo de universidad, sino de su visión acerca del proceso educación –enseñanza.
LA VERDADERA CALIDAD ES LA QUE SE BASA EN RESULTADOS.
La verdadera educación es la que se basa en resultados. Los demás criterios suelen ser desconectados de la verdadera misión de educar, y el único juez es el estudiante, el padre de familia y la sociedad. El estudiante debe preguntar qué resultados conforma el paquete de compromisos de la institución: empleo, formación, plasticidad, estrategia de atención personalizada, pasión docente, compromiso social, etc.
Todas las personas tienen grandes talentos e inteligencias y por eso deben tener la misma oportunidad, reconocimiento y apoyo, no importa la calificación promedio con la que se hayan graduado del bachillerato. Todos los estudiantes son de primera. No debe haber categorías discriminatorias: los excelentes y los mediocres, los del alto nivel socioeconómico y los menos favorecidos, los becados y los “regulares”. Todos son etiquetas artificiales. Dentro de algunos años serán obsoletos los sistemas actuales de evaluación que no reconocen las inagotables manifestaciones de la inteligencia.
Todos los estudiantes merecen un trato adecuado y respetuoso, sin marcar desigualdades. Esta práctica ha hecho y seguirá haciendo mucho daño a los estudiantes, sin importar la categoría donde sean colocados. Asimismo el docente tiene el desafío de apoyar al estudiante que tiene posibles deficiencias específicas y estimular el aprendizaje mediante la amplificación de sus talentos y habilidades de manera personalizada.
Todo ello le va a permitir ser un estudiante con una solida formación universitaria, que se adecue fácilmente a las cambiantes necesidades laborales que les exigen el contexto y los ajustes que experimentará durante toda su vida. Tiene una mentalidad plástica y fácilmente adaptable. Este solo factor es y será clave para una vida mejor.
Un estudiante universitario con una educación aceptable no debe, por ningún motivo, enfrentar un ambiente de desempleo o sub empleo al egresa. Al contrario si ese es el futuro y no existe compromiso serio , en ese plano, por parte de la organización educativa, entonces no hay conexión con el mundo real y las intimas inquietudes con la trilogía: persona, familia y sociedad.
EDUCACION AUTORITARIA, TALENTOS DESPERDICIADOS Y ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS SIN VOZ NI VOTO.
1.-Se debe tener en cuenta que la educación donde el maestro y la administración universitaria son las grandes autoridades y poseedoras de la verdad indiscutible, es incorrecta porque suprime la creatividad e inhibe el ánimo de aprender. Es un atentado contra la libertad del estudiante.
2.-La atmosfera educativa debe ser de compañerismo entre docentes-estudiantes y entre los estudiantes mismos. La cultura de sumisión del estudiante es reprobable. L a evaluación de la persona debe centrarse en el continuo aprovechamiento cotidiano de su actividad universitaria, y no solo en la aplicación de exámenes parciales o finales. Cada estudiante requiere retroalimentación permanente de progreso durante su proceso de educación enseñanza-aprendizaje porque nadie es igual a nadie.
3.-Los estudiantes son la única voz autorizada a la hora de evaluar la virtud o fracaso de un esfuerzo educativo. Una universidad donde domina el criterio de la administración y el docente o académico de manera caprichosa, esta desconectado de su finalidad. Es necesario volver a colocar al estudiante como el único protagonista del modelo educativo. Los docentes son solo guías facilitadores.
En el mundo entero se habla de la necesidad urgente de una gran reforma de la educación. Hay una gran claridad y convicción: infinidad de modelos no cumplen con el objetivo de “educar” que requiere la circunstancia actual. Hasta hoy, se siguen aplicando solo parches. No se puede concebir la educación desligada de su responsabilidad social.
Una educación sin el fomento de la conciencia emprendedora es mutilante. Pero más mutilante es cuando se enfoca a la idea lineal de que ser emprendedor es el simple acto de crear una empresa propia como sinónimo de éxito. Un emprendedor es alguien que transforma el entorno y resuelve problemas a su paso. Y nadie puede ser un auténtico emprendedor si tiene una visión de túnel, es decir si limita su maravilloso cerebro en una especialidad única sin la inquietud de relacionar conocimientos diversos. Es imposible ser creativo o innovador si no se tiene conciencia innovadora.
Finalmente se puede concluir en que los estudiantes deben de salir perfectamente preparados para integrarse de inmediato al mundo laboral y debe ser un compromiso básico de la universidad. Este escenario debe ser el resultado del proceso educativo que se recibe, y si no sucede, es que la institución no cumple con una de sus finalidades más sensibles. No es posible tener un desempeño atractivo si un estudiante egresa con un flamante título profesional, pero sin estas cualidades:exelentes habilidades de comunicación ( verbal y escrita), pasión por la lectura, conciencia de los grandes problemas de la humanidad y su responsabilidad para sumarse a la solución, honestidad/integridad, facilidad para trabajar en equipo, habilidades para relacionarse con otros, conocimiento de uno o dos idiomas extranjeros y sus culturas; orientación a la solución de problemas de todo género , facilidad para la investigación, ética laboral sólida, motivación/iniciativa, flexibilidad/adaptabilidad, habilidades analíticas y computacionales ; orientación hacia los detalles habilidades de liderazgo , autoconfianza, prudencia/tacto, sentido de la fraternidad/amistad, buenos modales, emprendimiento creativo y buen humor. Estos son atributos que deben estar en el centro del espectro educativo de la institución.
LIC. VILMA JAQUE LLANOS
DOCENCIA UNIVERSITARIA
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